Hipertensión Arterial Pulmonar

Preguntas frecuentes

¿Cómo se diagnostica la hipertensión pulmonar?

El diagnóstico de la hipertensión pulmonar se basa en una combinación de síntomas e historial familiar así como en resultados de pruebas físicas, radiológicas, pulmonares y cardiacas. 1 Para confirmar el diagnóstico es necesario conocer la presión en las arterias pulmonares, y existen dos pruebas a través de las cuales se puede obtener esta información: el ecocardiograma, que no siempre permite obtener este dato, y el cateterismo cardiaco derecho que es la prueba más fiable. 2

¿Cómo debe tratarse la hipertensión arterial pulmonar? 3

No existe una respuesta directa a esta pregunta, lo que es importante saber es que el especialista en HAP tomará una decisión de abordaje de la patología en base a los siguientes factores: 3

• El tipo específico de HAP o HP de cada caso
  
• La causa de la patología, así como el estadío y nivel de riesgo en que se encuentre
• La edad y estado de salud general de la persona
  
• Si el paciente padece o no de otras enfermedades y las medicaciones que tiene pautadas para ellas
  
• Valorará si a raíz de alguna comorbilidad hubiese algún tratamiento incompatible

HAP y actividad física, ¿son compatibles? 4

Es recomendable que paciente y médico acuerden un programa de ejercicio individualizado. Generalmente, estos programas pueden incluir ejercicios de activación cardiovascular (como la natación, bicicleta o caminar) o bien, actividades que se enfoquen esencialmente en tonificar algunos músculos (como estiramientos o levantar un poco de peso con brazos y/o piernas). Está completamente desaconsejado iniciar un programa de ejercicio sin consentimiento del médico especialista. 4

Quisiera planear un viaje, pero tengo HAP. ¿Puedo? ¿Qué cosas debo tener en cuenta?

Viajar permite a las personas vivir una vida plena, y los pacientes con HP no son la excepción. 5 Durante un vuelo, a medida que aumenta la altitud, la concentración de oxígeno disminuye y, a pesar de que los aviones están presurizados el nivel de oxígeno es menor. 5,6Para que la decisión de viajar resulte lo más segura posible, es indispensable la panificación con tiempo del viaje y sobre todo, el poder informar al equipo médico de el/la paciente. 6La previsión será su principal aliada y por ello, debe tener en cuenta varios aspectos:

Preparación previa:

• Se recomienda llevar siempre contigo el último informe clínico en el que figure tanto que tienes HP, como la medicación que tomas para ello, ya que algunos países pueden solicitar estos u otros documentos para poder portar medicamentos. 5
• Consulta especialmente con tu médico todos los aspectos a tener en cuenta si precisas de medicación subcutánea, intravenosa u oxígeno ya que esto implicaría gestiones adicionales y documentación especial. 5
  
• Es también recomendable que incluyas una forma de contacto con tu doctor y que tengas localizado a un especialista o médico familiarizado con la patología en tu destino. 5,6
  
• Realiza la facturación con antelación, escoge un asiento espacioso y, en caso de ser preciso, coordina con la aerolínea cualquier apoyo especial que puedas necesitar como es el caso de silla de ruedas o un transporte de puerta a puerta. 5
  

Durante el trayecto, independientemente si tu viaje depende de un vuelo, barco, tren o coche o autobús:

• Lleva contigo siempre la medicación suficiente, en su propia caja, para el tiempo del viaje. Además, guárdala en el equipaje de mano (es mejor tenerla a mano por si se pierde el equipaje facturado). 5
  
• Levántate y camina un pequeño trayecto en el avión al menos cada dos horas. 5